¿El amor? Queramos o no siempre vivimos con la idea de que todo tiene un final, nos podemos sorprender de lo rápido que puede aparecer, pero sabíamos que la historia del príncipe azul no iba a durar para siempre.
¿La familia? La propia sangre de tu sangre, aunque te equivoques siempre estarán para darte el calor necesario y el apoyo incondicional.
Sin duda la más dolorosa de las decepciones proviene de la amistad. Amistad... ¿Qué significa? ¿Será una conexión interpersonal con otra persona? Demasiado técnico... La amistad no puede definirse con palabras. Se basa en la complicidad, en el afecto, en el amor, cariño, pasión, dolor, realidad, puro sentimiento que creemos que durará para siempre, por que la amistad la cuidamos desde un principio, como una pequeña semilla que riegas para que se convierta en una preciosa y delicada rosa, siendo constantes para que no muera; por que no quieres perder a esa persona que es tanto para ti.
Pero llega ese momento. En el que te decepciona, te hace lo inimaginable, te falla. Sientes como una gran parte de ti se va resquebrajando y no entiendes el por qué. ¿Porqué, si yo hice todo lo posible por ayudarla en cualquier momento, a cualquier hora? No hay explicaciones, ni razones, ni motivos.
A base de palos se aprenden, pero hay palos que a veces cuesta quitárselos de encima para seguir adelante.
No caeré en tu juego, no me rebajaré a tu nivel. No lloraré por ti y menos aún sonreiré, simplemente me llenaré de apatía hacia todo lo que incluya tu persona. Has conseguido caer tan bajo que das vergüenza ajena, has perdido el norte y no sabes que hacer mientras intentas destruir todo lo que he creado.
Pero sé que soy fuerte, por mucho que llueva al final lograré volver a ver el sol y las personas que me apoyan ahora sé que estarán para siempre. Porque nada podrá impedirme sonreír y menos tú.
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